lunes, octubre 06, 2008

Ahora Estoy Triste (Ontología Centro de Llamadas)

No más cubanos con la necesidad de contactar a sus parientes, aunque sea de forma efímera.




No más oficinistas americanos intentando hacerse los listos, con la necesaria risa generalizada de fondo.




No más Dominicanos luchando con todo su esfuerzo con tal de que yo consiga hacerles una venta.




No más centroamericanos sabihondos que me hacer creer y me llevan por todo el procedimiento sólo para colgar a pocos pasos de realizar mi venta.




No más peruanos. Ellos reciben una oferta inferior a ¢4 el minuto al llamar de Estados Unidos a Perú. No puede ocultarse.




Nunca tuve mexicanos, argentinos, brasileños, europeos o asiáticos. ¿Entre menos gente mejor cierto?